Ya que la época decembrina viene acompañada de una serie de celebraciones continuas con cierta relación con navidad y año nuevo, como lo son las posadas, las fiestas de fin de cursos, los intercambios, entre otros, la Comisión Nacional contra las Adicciones (CONADIC) señala que se debe tener un consumo moderado de alcohol durante los festejos propios de la temporada.
Dentro de las celebraciones mencionadas, se suma una en particular, que en Salamanca tiene varios adeptos y que el box pópuli denomina como: “El Maratón Guadalupe-Reyes”, avalancha de celebraciones que inician el 12 de diciembre, día de la virgen de Guadalupe y culmina el 6 de enero, día de los Reyes Magos.
Y es que además de las 15 fiestas oficiales como el Día de la Guadalupana, el novenario de posadas, la cena de Noche Buena, la comida de Navidad, la cena de fin de año, el recalentado de Año Nuevo y la merienda del Día de Reyes para partir la rosca, también son fechas donde se realizan muchas celebraciones con la familia, vecinos, amigos, colegas del trabajo, los ex compañeros de la preparatoria o la universidad y para variar, el mes de diciembre es muy solicitado para celebrar bodas, 15 años y bautizos, lo que significa más fiestas y más banquetes, debido a la solvencia económica que brinda el aguinaldo y la oportunidad que traen las vacaciones escolares.
Son varios días los que distintas personas optan por consumir bebidas embriagantes y por tanto, los riesgos aumentan considerablemente, toda vez que este patrón se asocia con mayor probabilidad de daños físicos y emocionales, incluyendo violencia, accidentes, embarazos no planificados, sexo sin protección, ETS y VIH sida, ausentismo laboral, entre otros, según informa la página www.gob.mx.
Lorenzo, residente de El Divisador, es un Salmantino que se toma muy en serio este maratón: “Yo bebo desde el 12 de diciembre, con los rezos a Lupita y demás y así me la llevo hasta el día de los Reyes; no bebo en todo el año, me guardo para estos 25 días”, comenta.
Al cuestionarle si no le preocupaba su salud o algún accidente, nos dijo: “Pues yo soy bien tranquilo, estoy aquí en casa con mi familia, no salgo, no manejo, me surto desde días antes lo que voy a beber y de pasarme algo pues me tocaba, así es la vida”, finalizó.
Sin lugar a dudas son fiestas llenas de alegría y compañía familiar, no obstante se deben tomar las precauciones necesarias, sobre todo si se va a conducir; la intención es pasarla bien sin perjudicarnos o perjudicar a terceros, por lo que El Salmantino le recomienda beber con moderación y sobre todo: le deseamos una ¡FELIZ NAVIDAD!