La temporada navideña ha llegado y con ella el comercio de artículos diversos muy populares por las fechas y las flores de nochebuena no son la excepción pues ya se encuentran instalados en el municipio diversos puestos que ofrecen este bello producto a los consumidores salmantinos.
Ya sea como decoración o como un bonito obsequio, estas flores son una especie nativa de México, la cual pertenece a la familia de las euforbiáceas como el ricino. Su nombre científico es Euphorbia pulcherrima y posee un enorme valor ornamental, siendo una de las plantas más cultivadas en todo el mundo y se siembran millones de arbustos anualmente a nivel global. [1]
En esta época, donde el equilibrio económico se vio afectado luego de la pandemia por COVID-19 los comerciantes salmantinos invitan a la población a consumir local y regalar sonrisas a los suyos, pues esta bella flor representa sin duda el espíritu navideño.
Tal como mencionó el testimonio, adquirir una de estas flores también es apoyar al campo mexicano y en este sentido, es importante resaltar que los horticultores han conseguido variedades con flores de diferentes colores, desde rojo, rosado, salmón, hasta blancas; dejando ver el esmero y dedicación que ponen en su trabajo.
Otro factor que sobresale son los costos accesibles en las que se ofertan estas flores, pues se encuentran desde 3 piezas por 100 pesos y hasta los 120 pesos cuando son de mayor tamaño.
Los cuidados que esta flor requiere son sencillos:
- Debe tener algunas flores y no solamente hojas, así durarán más tiempo.
- Esta planta se adapta tanto a interiores como exteriores y soporta muy bien los climas cálidos sin heladas o con heladas débiles de hasta –2 grados.
- Dejarla lejos de las mascotas, pues si la ingieren es perjudicial para ellos.
- Mantene la planta alejada de radiadores, estufas o cualquier fuente de calor, ya que puede dañarla.
- Regarla por las mañanas con agua limpia y a temperatura ambiente, 2 veces por semana (en temporada de noviembre y hasta febrero).
Además podemos conservar nuestra nochebuena siempre que después de la floración, que sucede de noviembre a febrero, esté en un lugar con más iluminación natural, además de regarla únicamente una vez a la semana y utilizar un abono biológico suave. [2]
No cabe duda que estamos ante una magnífica opción decorativa no solo por tratarse de esta temporada, sino para mantenerla por todo el año, además de, como se ha mencionado, apoyar al comercio y al campo y por supuesto también puede ser un delicado y lindo detalle para regalar.
[1][2] www.inecol.mx