El ahora exdirector de Seguridad Pública Coronel Alejandro Flores Jiménez prefirió deslindarse de responsabilidades como titular de la Dirección y quiso cargarlas sobre otros funcionarios como custodios y más personal que trabaja el área, con todo y que el coronel fungía como titular de la Dirección General de Seguridad Pública, se lavó las manos y culpó a la administración de no proveer necesidades económicas para la seguridad.
Uno de los puntos de renuncia según Flores Jiménez fue la ausencia de un dron millonario, dejando ver que algo como eso tuvo demasiado peso en él para dejar de lado una labor tan importante como la seguridad de los salmantinos.
Flores Jiménez habló con prensa local y declaró que había “roces” que existieron con otras direcciones, como sucedió con Movilidad, algo que según dijo, influyó para su renuncia; dejando ver nuevamente que sus declaraciones únicamente buscaban lavarse las manos y evitar señalamientos que al final del día sí caían sobre él al tratarse del director general de seguridad.
El coronel Alejandro Flores Jiménez, dejó su cargo como director de Seguridad Pública sin siquiera haber cumplido con las recomendaciones emitidas por la Procuraduría de los Derechos Humanos del Estado de Guanajuato en cuanto a ofrecer una disculpa pública y pagar una compensación tras la muerte de Antonio Quintana que se quitó la vida en los separos del C4.
Lo cierto, es que sin haberse obtenido los resultados deseados y los que tanto mencionó daría a la ciudadanía salmantina, Flores Jiménez ha dejado la titularidad de Seguridad Pública en medio de muchas preguntas y pocas respuestas; la población solo espera y confía que su sucesor pueda y tenga la capacidad necesaria para desempeñar las tareas que el puesto le demande, y sobre todo, que dé resultados y ofrezca tranquilidad a las familias salmantinas.
