Babeo durante el sueño: para algunos es una señal de descanso profundo, mientras que para otros es una incomodidad que prefieren evitar. Este fenómeno, llamado sialorrea nocturna, ocurre cuando hay una acumulación excesiva de saliva en la boca que no es tragada mientras dormimos. Esto puede deberse a distintas razones que abarcan desde una postura específica hasta problemas de salud.
Causas comunes del babeo al dormir:
1.Etapas de sueño profundo: Durante las fases de sueño REM y de sueño profundo, los músculos de nuestro cuerpo, incluyendo los que controlan la deglución, están relajados. Esto puede hacer que la saliva se acumule y termine escapando.
2.Postura al dormir: Dormir boca abajo o de lado facilita que la gravedad haga que la saliva salga de la boca, en lugar de ser tragada.
3.Congestión nasal o problemas respiratorios: Si tienes dificultad para respirar por la nariz, la boca permanece abierta, lo que hace que sea más probable que la saliva escape.
4.Problemas de salud subyacentes: Trastornos como las infecciones de garganta, las alergias o incluso condiciones neurológicas pueden aumentar la producción de saliva y su retención en la boca.
¿Es bueno o malo babear mientras duermes?
En términos generales, el babeo ocasional no es perjudicial y, de hecho, puede ser una señal de que el cuerpo está alcanzando un sueño profundo y reparador. Sin embargo, si el babeo es constante y excesivo, podría indicar un problema de salud. En esos casos, es recomendable consultar a un especialista para evaluar si existe alguna condición subyacente, como la apnea del sueño, problemas neurológicos o una congestión nasal crónica.
¿Cuándo preocuparse?
Si el babeo va acompañado de otros síntomas, como ronquidos fuertes, interrupciones del sueño, problemas para respirar o dolor de garganta, podría ser señal de una condición que necesita tratamiento. Detectar y tratar la causa de fondo puede mejorar tanto el sueño como la calidad de vida en general.
El babeo ocasional no es motivo de preocupación y puede ser una señal de un sueño profundo. Sin embargo, si se convierte en un problema regular o causa molestias, evaluar los factores subyacentes puede ser clave para encontrar una solución.