Las fiestas decembrinas son una época para celebrar, compartir con la familia y disfrutar de los platillos típicos de la temporada. Sin embargo, también son sinónimo de excesos que pueden afectar tu salud si no tienes cuidado. Desde comidas abundantes hasta postres irresistibles y largas reuniones que dejan poco tiempo para el ejercicio, este mes puede convertirse en un reto para tu bienestar físico.
¿QUÉ PASA CUANDO NOS EXCEDEMOS?
1.Sobrecarga Calórica
Los platillos navideños suelen ser ricos en calorías, grasas y azúcares. Tamales, romeritos, pavo y el tradicional ponche, aunque deliciosos, pueden sumar más de lo que tu cuerpo necesita diariamente. Los excesos prolongados pueden traducirse en aumento de peso en pocas semanas.
2.Dificultad para Digestionar
El abuso de alimentos ricos en grasa o azúcares puede generar problemas como indigestión, acidez o pesadez estomacal. A esto se suman las bebidas alcohólicas, que complican aún más el trabajo de tu hígado.
3.Fatiga y Estrés
Con tantas reuniones, compras y compromisos, el tiempo para actividades físicas queda reducido. Esto no solo afecta tu energía, sino que puede generar fatiga acumulada, que, combinada con una dieta desbalanceada, impacta tu productividad y estado de ánimo.
¿Y EL GIMNASIO?
Es común que en diciembre las personas abandonen su rutina de ejercicio por falta de tiempo o por considerar que “ya no tiene caso”. Sin embargo, esta pausa puede hacer que pierdas el progreso que habías alcanzado durante el año. No olvides que mantenerte activo ayuda a contrarrestar los efectos de los excesos y a evitar el aumento de peso.
CÓMO ENCONTRAR UN BALANCE
•Disfruta con Moderación: No necesitas evitar tus comidas favoritas, pero sí controlar las porciones.
•Mantente Activo: Aprovecha caminatas al aire libre o actividades físicas en casa si no puedes ir al gimnasio.
•Hidratación Constante: Toma agua entre comidas y evita excederte con refrescos o alcohol.
•Postres con Medida: Prueba porciones pequeñas, recuerda que siempre puedes repetir al día siguiente.
Las festividades están para disfrutarse, pero tu salud es un regalo invaluable. Encontrar un equilibrio te permitirá iniciar el próximo año sintiéndote bien contigo mismo, listo para cumplir tus metas sin cargar con los “kilitos extra” de diciembre.