SEGURIDAD VULNERABLE
Ninguna estrategia ha funcionado para contener los homicidios y crímenes de alto impacto en la región Laja-Bajío, concretamente en Apaseo el Grande y Apaseo el Alto se han suscitado varios hechos violentos que han alcanzado a los más altos rangos de seguridad.
El último asesinato o el más sonado, el homicidio del director de la Policía en Apaseo el Grande J. Jesús Salgado Martínez quien trabajó en la corporación por más de 20 años.
Y al hablar de cifras, cada vez la delincuencia desafía a la autoridad, es la primera vez en la administración de Miguel Márquez que se registra el asesinato de un mando policíaco, pero no el único. En dos años en Celaya han muertos nueve policías a manos de la delincuencia; en Salamanca son tres; en Irapuato uno y al menos en los 46 municipios, oficiales de cualquier rango han sido agredidos en mayor o menor proporción.
Por más que la Secretaría de Seguridad Pública del Estado, el propio gobernador Miguel Márquez, se empecinen en declarar contra viento y marea que la delincuencia no ha rebasado a la seguridad, ahí está la muestra de lo que sucede en Guanajuato.
VENDEN TEMOR POR INSEGURIDAD
La delincuencia en Salamanca está desatada, diariamente cualquier comercio es blanco de los asaltantes y en cualquier ubicación de la ciudad los criminales actúan.
Anteriormente los establecimientos de la zona sur eran los más vulnerables, después en la zona centro, ahora en la zona norte, es decir, ningún comercio se salva.
Aunque no quisiéramos pensar mal, pero quizá esta ola de delincuencia podría tratarse con un propósito, que la Policía Municipal deje de atender reportes o actuar para vender a los comerciantes y pequeños empresarios la Policía Auxiliar.
Ese proyecto que se anunció como uno de los mejores y más destacados de este año y que se aprobó en Ayuntamiento sólo ha quedado en proyección más no en ejecución, porque primero, no hay personal para conformar a esta corporación y segundo, no hay quién pague por seguridad privada.
Quizá el desinterés y poco trabajo para prevenir y atender los robos, pueda deberse a que el Municipio pretenda vender a la Policía Auxiliar como la única solución para evitar los robos.
PASIVOS SOMOS
Ya es tiempo de que los salmantinos elevemos nuestras voces pero unidos para exigir a todo funcionario público que se enfoque a hacer su chamba, ya estuvo bueno que tanto aquí en Salamanca como en la mayor parte del país mantengamos esa actitud conformista, que de todo opinamos pero ningún dedo movemos para cambiar el rumbo, empezando por lo que está en nuestro entorno y que en primera estancia después de nuestras familias es empaparnos del trabajo y gestiones que realiza nuestro Presidente de Colonos o bien nuestro Delegado en Comunidad, para posteriormente exigir los apoyos que se requieren, pero es bien cómodo que haya alguien que lo haga por nosotros pero lamentablemente pocos son lo que se preocupan por el beneficio de todos, bien dicen que cada pueblo tiene el gobierno que se merece.
EXIGIR LO NUESTRO
Y ligado con lo anterior, si no conocemos, no nos informamos, pues como vamos a exigir lo nuestro, de dónde exigimos a Justino Arriaga Rojas que demuestre en donde están los 14 millones que destinó para la compra de terrenos para los proyectos de la feria, el panteón y la supuesta clínica del IMSS y como le exigimos a Antonio Arredondo Muñoz que no diga donde quedaron los 7 millones que él gestionó para los mismos proyectos, eso sin contar los 100 millones de pesos que ya le fueron autorizados en un préstamo, porque señores quienes pagaremos ese dinero somos nosotros, esos millones son de los salmantinos, pero necesitamos quitarnos la venda y exigir las cuentas de lo que nos pertenece y de lo que pagaremos por 18 años, eso sin contar los intereses.
ECOLOGÍA SIN RUMBO
De todas las dependencias municipales que no dan una en Salamanca, la que pareciera que definitivamente ha perdido no solo el rumbo, sino que simplemente en las últimas fechas no se le ve hacer nada, con una titular cada vez más invisible, que con el pretexto de la enorme cantidad de asuntos pendientes en materia ambiental y ecológica, ya no se le ve, ni es su silla, mucho menos atendiendo la gran cantidad temas y problemáticas de competencia ambiental que arrastra Salamanca.
DEFICIENCIAS
Es tal la deficiente labor de María del Carmen Mejía Alba, que como si estuviera en competencia con el alcalde Antonio Arredondo Muñoz para ver cuál de los dos falta más y cual cumple menos con su labor; en el caso de la directora de Ecología cada vez más se nota el enorme atraso y la desatención a problemáticas simples, como exigirle a dependencias como Parques y Jardines que hagan su chamba y en lugar de andar ofertando sus servicios en lo particular, atiendan las solicitudes ciudadanas de cuidar y dar mantenimiento a las pocas áreas verdes que tiene el municipio y que están muriendo por la decidía y la falta de interés.
OBRAS POR SIN NINGÚN LADO
La otra dependencia que pareciera nomás no da una, es la dirección de Obras Públicas, a cargo de Emmanuel Herrera, con el montón de obras que tiene a medias y que se realizan por sin ningún lado, como es el caso de La calle Juárez Allende en la que no bastaron los 35 millones de pesos que costó y a casi cuatro años en proceso, no está terminada, con un montón de desperfectos y fallas que así recibió el municipio, en espera que la constructora Macías Rangel, termine lo que dejó a medias y con el argumento de que no le autorizará que Gobierno del Estado le finiquite el pago hasta que no termine lo que falta y repare los baches y fallas que van en aumento.
