· Es recomendable realizar actividades atractivas para evitar la acumulación de tensión
El estrés es una respuesta natural del organismo ante ciertas situaciones, pero el hecho de que esté presente permanentemente y en niveles altos puede llegar a desestabilizar de manera general, ocasionando enfermedades y riesgos a la salud.
“El organismo emplea una serie de mecanismos internos de forma autónoma, lo que le permite realizar sus funciones de manera normal, se trata de hormonas y/o sistema nervioso autónomo; cuando existe un factor o condición interna o externa con el que se ve amenazado ese equilibrio, se genera el estrés”, comentó el doctor Alfredo Báez Montes.
Actualmente, el contexto social y ambiental son los factores más importantes que generan estrés, el ritmo de vida, horas de trabajo, cambio en los horarios de sueño, entre otros, condicionan la aparición de esta afección, además si le sumamos situaciones financieras, familiares y algún patología que se padezca, se incrementa el nivel de estrés.
Ante el estrés crónico o de manera constante, el organismo emplea mecanismos que condicionan su equilibrio normal afectando la capacidad de concentración y de quehacer cotidiano en el ambiente laboral, familiar, escolar, etc.
El sistema endócrino que regula las hormonas, el sistema inmune que regula nuestras defensas y el sistema nervioso autónomo, son los tres aspectos que afecta el estrés. Por lo anterior, el estrés puede provocar que la persona se distraiga, viva acelerada, baje su rendimiento, no cumpla objetivos, presente debilidad emocional, trastornos del sueño, problemas de interrelaciones personales, se enferman más seguido por baja de defensas e, incluso, se afecta la frecuencia cardiaca y presión arterial.
Báez Montes recomendó, para evitar el estrés acumulado, realizar actividades atractivas, procurar espacios de tiempo y lugares con la familia, amigos y amistades en los que sea posible desconectarse de presiones y de una vida acelerada.