*Lo angosto de la banqueta y la ubicación de postes en la calle Abasolo  complica el paso de las personas por lo que tienen que caminar sobre la calle arriesgándose en la fila de vehículos que esperan ser atendidos por personal de un bar en la zona.

Consideran de gran riesgo transeúntes la acumulación de vehículos en la calle Abasolo en el tramo de Cruz Roja y Pasajero, ya que aseguran después de las 5 de la tarde los carros que se forman parar adquirir bebidas alcohólicas de un conocido bar ubicado en la zona, no permiten el paso, además de los coches que se estacionan en doble fila para cargar producto de una empresa que se encuentre también en el lugar. 

“Paso diariamente, es mi pasada y voy con mis hijos con la carriola y todo eso y a partir del miércoles al sábado y todavía el domingo en la mañana se estacionan muchos carros ahí, ahora sí que a esperar a que los atiendan la gente del Tonys para que les lleven las bebidas a su vehículo, luego también los del huevo San Juan se estacionan en doble fila y si se ha fijado las banquetas son muy angostas  y aparte hay postes por lo que uno se tiene que bajar de la banqueta”, comentó Moisés. 

Agregó que en el transcurso de la semana pasada se acerco a elementos de seguridad vial para realizar su reporte sin éxito “Fui con los tránsitos, estaban parando a los de las motos y les comenté pero ya antes los tránsitos me dijeron que tenían un tipo de permiso que no sabían cuál pero tenían permiso, yo les comenté que el permiso es para vender alcohol, no para que utilicen la calle de estacionamiento.”

Consideró que las acciones implementadas por el gobierno son contradictorias, ya que la actual administración realiza operativos de alcoholímetro, pero a su vez permite la venta directa de bebidas embriagantes en los vehículos, “Es una contradicción que hagan retenes de alcoholímetro y permitan que lleven las bebidas porque ellos mismos saben y ni les dicen nada” dijo Moisés. 

Por último resaltó el riesgo de transitar por ahí ya que dijo que en la mayoría de las ocasiones tienen que ir por la calle con la carriola y los conductores ya están bajo el influjo del alcohol, “Al momento de salir ni se fijan y agarran y se salen así a la brava y pues es un riesgo para quienes transitamos por ahí.”