Expertos de la ONU en derechos humanos pidieron hoy al Gobierno de Estados Unidos que detenga la ejecución del ciudadano mexicanoRubén Cárdenas Ramírez, prevista para este miércoles en el estado de Texas, por considerar que no tuvo un juicio justo.
«Si la ejecución planeada se realiza, el Gobierno estadounidense habrá aplicado la pena de muerte sin cumplir con los estándares internacionales de derechos humanos», dijeron los relatores de la ONU sobre ejecuciones extrajudiciales, Agnes Callamard, y la vicepresidenta del grupo de trabajo sobre detenciones arbitrarias, Elina Steinerte.
«Tal acción equivaldría a la privación arbitraria de la vida», añadieron.
Ambos pidieron que se anule la sentencia a muerte contra Cárdenas y que se le vuelva a juzgar conforme a las normas internacionales que garantizan un debido proceso.
Cárdenas fue encontrado culpable de un asesinato en 1998, pero durante los primeros once días de su detención no tuvo acceso a un abogado.