Los agricultores deben tener un plan de respaldo en caso de que Estados Unidos salga del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
Lo anterior lo afirmó Ted McKinney, subsecretario de comercio y asuntos agrícolas extranjeros de Estados Unidos, en una entrevista exclusiva con Agriculture.com.
El dejar el tratado todavía parece ser una posibilidad real, en medio de informes de que las negociaciones no están yendo tan bien como se esperaba.
Las conversaciones entre EU, México y Canadá iniciaron después de que el presidente Donald Trump firmara una orden, poco después de asumir el cargo, para renegociar el acuerdo en medio de preocupaciones de que el déficit comercial estadunidense con México es insostenible y para eliminar lo que la administración considera como subsidios injustos.
El representante comercial de EU, Robert Lighthizer, señaló en un comunicado después de la quinta ronda de conversaciones, que finalizó el mes pasado, que los negociadores lograron algunos avances para modernizar el TLCAN, pero que sigue preocupado por la falta de progreso.
Hasta ahora, añadió, no hay evidencia de que Canadá o México estén dispuestos a comprometerse seriamente en disposiciones que conduzcan a un nuevo acuerdo.
Mientras que McKinney comentó que él y otros dentro del Departamento de Agricultura son optimistas en el hecho de que Lighthizer logrará un triunfo en las negociaciones.
Pero, aun así, aconsejó que sería prudente que los productores de cultivos y ganaderos consideren algunas estrategias en caso de que su país abandone el acuerdo.
«La administración sabe muy bien dónde están los agricultores y las industrias agroalimentarias, pero aconsejaría a cualquiera que esté preparado para las contingencias», expresó.
«La diversificación puede ser una oportunidad, y siempre debemos estar pendientes de ello. Deberíamos pensar en eso en el mejor de los casos».
Añadió que los negociadores tienen en mente mejorar los intereses de los agricultores y ganaderos.
Aun así, los productores estadunidenses deben recordar que el TLCAN es un acuerdo multifacético y abarca algo más que agricultura.
«Sabemos que el presidente y otros que trabajan en el comercio han escuchado la premisa ‘no dañar a la comida y a la agricultura’, y esperamos que siga en primer plano, pero también debemos recordar que el mandatario fue elegido para servir a todas las industrias, no solo la agrícola», explicó McKinney.
«El ingenio del agricultor estadounidense es algo que nunca subestimaría».
Kevin Skunes, presidente de la Asociación Nacional de Productores de Maíz, dijo en un comunicado la semana pasada que los productores y ganaderos estadunidenses están observando de cerca las negociaciones del TLCAN y quieren asegurarse de que sus voces sean escuchadas.
«Agricultores y ganaderos de todos los sectores están enviando un poderoso mensaje al presidente sobre la importancia de permanecer en el TLCAN», comentó Skunes.
«Los productores de maíz de Estados Unidos respaldan a la administración mientras negocia un acuerdo comercial mejorado, pero debe garantizar que estos mercados vitales permanezcan abiertos a las exportaciones agrícolas».
Aunque McKinney dijo que no tiene todos los datos sobre las conversaciones en curso sobre el TLCAN, espera que los productores y ganaderos se mantengan positivos sin importar el resultado de las negociaciones.
