Luego de que la alcaldesa Beatriz Hernández, diera a conocer el avance del informe, sobre la revisión de la documentación de entrega-recepción, donde se habían detectado anomalías y varias deudas generadas por compras fantasma y a sobre precio de la pasada administración, los ex funcionarios panistas salieron a defenderse justificando que la deuda proviene de administraciones pasadas, de igual forma de Acción Nacional.
Panistas pertenecientes al gabinete de trabajo de la pasada administración, entre los que se encontraban el actual regidor Víctor Hugo Rueda Olmos, el anterior Tesorero, Héctor Alfaro y subtesorero, Paul Herrera, quiénes aseguraron que la revisión no se llevó a cabo de manera clara por lo que, a su parecer, la alcaldesa mintió en su informe.
Fue de esta manera, que justificaron que las cifras fueron interpretadas de manera errónea, asegurando, que todos los recursos licitados, fueron aplicados para atender las necesidades del municipio.
Posteriormente, los panistas declararon que la deuda que existe, no fue resposabilidad total de la administración encabezada por Antonio Arredondo, sino que ésta, viene originada desde las gestiones de Ignacio Luna Becerra y Justino Arriaga Rojas.
Así mismo, justificaron el monto, por el cuál se expedia un monto mensual a Ana María Rangel Frías, empleada simple de la administración, era la responsable de recibir los supuestos ‘descuentos’ de sueldo, de los funcionarios, que estos acordaban voluntariamente, con la finalidad de que fueran destinados al Partido Acción Nacional.