En México, dejar de pajar el agua se convirtió en una costumbre que se traduce en que a la Comisión Nacional del Agua (Conagua) no le han pagado más de 2,300 millones de pesos por el consumo del agua de uso industrial y otras actividades en México.
“Después de llevar a cabo una búsqueda minuciosa y exhaustiva en los sistemas y archivos a cargo de la Coordinación General de Recaudación y Fiscalización se desprende, que fueron localizados créditos fiscales (adeudos) susceptibles de cobro del 1 de enero de 2015 a mayo de 2020”, revela Conagua.
El organismo encargado de administrar, regular, controlar y proteger las aguas nacionales en México señala que el cobro de los créditos fiscales determinados por la Conagua a través de la Coordinación General de Recaudación y Fiscalización está a cargo del Servicio de Administración Tributaria (SAT), según la información entregada a una solicitud de Forbes México para conocer el monto de las deudas y el nombre de las empresas y personas de los deudores con una concesión para explotar el agua en alguna de las regiones de la República Mexicana.
“Al ser personas morales de carácter privado, quienes tienen los adeudos millonarios por no pagar el agua, su información está clasificada como reservada y confidencial por secrecía fiscal”, explica el órgano a cargo de Blanca Elena Jiménez Cisneros.
Feliciano Flores Anguiano, presidente de la Comisión de Recursos Hidráulicos, Agua Potable y Saneamiento de la Cámara de Diputados, dice que es necesario darle más poder a la Comisión Nacional del Agua para que cobren los adeudos de los concesionarios de agua en México.
La Conagua revela que hay deudas de 993 millones de pesos, ahora convertidas en créditos fiscales, por una serie de auditorías especiales realizadas a concesionarios, quienes han seguido utilizando el agua de los ríos y pozos.
Los concesionarios de la cuenca del Río Bravo, una región comprendida por municipios de Tamaulipas, Nuevo León, Coahuila y Chihuahua, adeudan más de 707 millones de pesos a mayo de 2020.
A principios de septiembre de 2020, en la cuenca del Río Bravo se registraron enfrentamientos entre agricultores de Chihuahua e integrantes de la Guardia Nacional por el cumplimiento de un tratado de aguas firmado entre México y Estados Unidos.
Cada año, Estados Unidos aporta por conducto del río Colorado mil 850 millones de metros cúbicos y México debe enviar 450 millones de metros cúbicos de agua que se generan en el río Bravo.
Los agricultores beneficiados con concesiones para usar el líquido almacenado en la presa La Boquilla del río Conchos, uno de los afluentes más importantes del Río Bravo, se opusieron a aportar agua para el cumplimiento del tratado.
Los concesionarios de la Cuenca Golfo Centro de Conagua, integrada por Veracruz, Puebla, Oaxaca e Hidalgo, tienen créditos fiscales por más de 207 millones de pesos.
Los permisionarios de la cuenca Lerma Santiago Pacífico, que incluye a Aguascalientes, Colima, Guanajuato, Jalisco, Estado de México, Michoacán, Nayarit, Querétaro y Zacatecas, adeudan más de 164 millones de pesos. Mucha del agua consumida en el Valle de México proviene de los caudales de la cuenca Lerma Santiago Pacífico.
De acuerdo con Conagua, los dueños de las concesiones de agua de las Cuencas Centrales del norte, conformada por la Comarca Lagunera de Durango y Coahuila y otros municipios de Zacatecas, tienen un impago de 75 millones de pesos.
INFORMACIÓN DE: FORBES