Cuando una persona tiene sensación de aturdimiento, pérdida de equilibrio, inestabilidad o siente que se va a desmayar, sufre de mareo, en tanto, el vértigo da la sensación de que la persona o el entorno está girando o moviéndose.

De acuerdo a los especialistas del sector salud, el mareo se presenta porque no llega suficiente sangre al cerebro a causa, por ejemplo, de baja presión arterial, deshidratación o cuando una persona se levanta demasiado rápido después de estar sentada o acostada. También cuando se presenta gripe, concentraciones bajas de glucosa en sangre, resfriado o alergias.

Aunque la mayoría de las causas de mareo no son graves, pueden estar asociadas a cambios de presión arterial, problemas vasculares, trastornos visuales, esclerosis múltiple, migrañas, tumores o infecciones virales o bacterianas.

Si presentas mareos al pararte puedes seguir los siguientes consejos:

  • Evitar cambios repentinos de postura.
  • Si te encuentras acostado, levántate lentamente y quédate sentado por unos momentos antes de pararte.

Es muy importante que si presentas mareos constantemente, consultes a tu médico con el fin de descartar cualquier tipo de enfermedad.