De acuerdo a diversas leyes mexicana, sin excepción alguna, ningún ejemplar de mamífero marino, primate, tortuga marina y aves de la familia Psittacidae (loros, pericos, cotorras y guacamayas) cuya distribución natural sea dentro del territorio nacional, podrá ser sujeto de. Aprovechamiento comercial; esta prohibición, no muchos la acatan e incluso se observa su comercialización en las calles de Salamanca.
Los loros son una parte fundamental de la rica biodiversidad de nuestro país. Su simpatía y belleza han llevado a una explotación que supera a la de cualquier otra familia de aves. En México, existen 22 especies de loros, todas protegidas por las leyes nacionales, debido a la disminución de sus poblaciones en las últimas tres décadas, causada principalmente por la captura ilegal y la destrucción de sus hábitats naturales.
Respecto a la presencia de “vendedores” de este tipo de fauna, el director de Medio Ambiente de Salamanca habló de la protección a que son sujetos y de que este es el motivo por el que no se deben vender o tener en resguardo a estas especies.
El tráfico ilegal de ejemplares, partes y derivados de flora y fauna silvestres, es un delito de conformidad con el artículo 420 fracciones IV y V del Código Penal Federal, que se castiga con pena de uno a nueve años de prisión y por el equivalente de trescientos a tres mil días multa.
Dentro de los animales comercializados ilegalmente se encuentran: monos, jaguares, pumas, iguanas, cocodrilos, serpientes de cascabel, halcones, pepinos de mar, iguanas, Psitácidos (loros, guacamayas, etc.), entre otros.
Si bien en Salamanca no es común observar mamíferos, felinos o reptiles, sí es más común el comercio de algún tipo de ave.
El funcionario exhortó a la población a no ser consumidores de este tipo de fauna y en caso de conocer algún caso de este tipo, reportarlo a las autoridad competente, es decir, a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) llamando sin costo al 800.770.3372 o en el sitio web www.profepa.gob.mx, llenando el Formato de Denuncias por Internet; aunque también puede existir un acercamiento con Medio Ambiente municipal y realizar la denuncia pertinente.
