León, Guanajuato. Tras enfrentarse a un largo proceso de inacción penal por parte de servidores del Ministerio Público, para cumplir con una orden de aprehensión girada en contra del director de una institución privada perteneciente al Opus Dei, por abuso sexual, los padres de un niño de 8 años tuvieron que ofrecer una rueda de prensa para exigirle al fiscal Carlos Zamarripa Aguirre y al gobernador Diego Sinhue Rodríguez Vallejo tomar cartas en el asunto.
Los hechos ocurrieron presumiblemente a finales de enero de este año cuando el menor, estudiante del Liceo León, comenzó a mostrar cambios importantes de conducta como enojo, irritabilidad y terrores nocturnos, que incluyeron orinarse en la cama todas las noches e insistirle a sus padres para que lo dejaran dormir con ellos.
Alfonso, el padre del pequeño, que lo describió como el más independiente de sus tres hijos, se dio cuenta de inmediato de lo que esto implicaba por lo que junto a su esposa buscaron la forma de que él les relatara lo que le había ocurrido.
Fue entonces que el niño le narró a María, su madre, que el director lo había buscado en los sanitarios de la escuela y llevado hasta su oficina, en donde cerró las cortinas y tras decirle que a su edad ya podía mantener relaciones sexuales, lo besó en la boca. Aterrado el pequeño salió huyendo a su salón.
Las conductas reiterativas de acoso por parte del director siguieron en los días siguientes, buscando pretextos para volver a acercarse al nene y tratar de llevarlo de nuevo a un lugar apartado, sin embargo él ya le había pedido ayuda a sus compañeros de clase que no lo dejaran solo ni un momento, para evitar otro ataque.
Alarmados, los padres dieron de baja de inmediato a sus tres hijos de la institución y acudieron al Ministerio Público a interponer una denuncia por abuso sexual, contando con el apoyo de un peritaje psicológico que acreditaba plenamente la agresión sufrida.
El 10 de febrero lograron radicar una carpeta de investigación con todos los hechos denunciados, pero al momento de buscar que se girara una orden de aprehensión contra el director del Liceo, el abogado defensor del pequeño, asignado por el Ministerio Público, hizo una defensa tan pobre del caso, del que ni siquiera conocía los detalles contenidos en la carpeta, que el juez desechó los cargos.
“No se hizo justicia en la primera instancia, tuvimos que llevar a cabo una apelación, ir hacia el Supremo Tribunal de Justicia para buscar una segunda revisión, y lo logramos. Pero esto es lo que hemos ido enfrentando desde el principio, todo el tiempo nos hemos topado con obstáculos de parte de las autoridades, han pasado 3 ministerios públicos a cargo de nuestra carpeta de investigación y ninguno de ellos ha sido capaz de poder cumplir con lo que se dispuso a través de la orden de aprehensión” narró Alfonso en la rueda de prensa ante los medios, para exponer el caso.
10 meses de impunidad
Tras lograr la orden de aprehensión de parte del Magistrado del Tribunal Supremo del Estado, luego de haber presentado una apelación del caso ya con un abogado particular, la familia sigue viendo trabas de la Fiscalía estatal para acceder a la justicia, incluyendo la fuga de información que se suponía confidencial, al abogado defensor del acusado.
“Tenemos un mes que se liberó la orden y nadie ha hecho nada, la Policía de Investigación está pidiendo prácticamente que nosotros como padres de familia hagamos todo el proceso de investigación para ubicar a esta persona y ponérselos en bandeja de plata. Esa no es nuestra responsabilidad, es de las autoridades”
“Hemos visto también que ha habido fuga de información, es increíble que una vez que se liberó una orden de aprehensión, de forma inmediata el defensor de esta persona estaba promoviendo un amparo. Por eso pedimos de la manera más atenta que tanto el gobernador como el procurador (fiscal) tomen cartas en el asunto, no es posible que llevemos 10 meses con esta situación y no se haya hecho nada” expresó Alfonso.
Conforme avanzaron con la denuncia, los padres del menor sufrieron actitudes cada vez más hostiles de parte del círculo en el que se desenvolvían, que incluyó no poder inscribir a sus hijos en ninguna otra escuela por evitarse problemas con las autoridades del Liceo León, y comentados reiterados de advertencia sobre no saber con quién se estaban metiendo.
En el camino también se encontraron con comentarios de otros padres de familia y empleados de la institución, asegurándoles que esa no era la primera vez que el director abusaba de alguno de los estudiantes y que era conocido por meter a las niñas a su oficina y regalarles pulseras y chocolates para comprar su silencio.
La madre de una de las víctimas se decidió también a interponer una denuncia en contra del hombre, representada por la misma defensa de Antonio y María. Los padres del menor aseguraron que en el proceso podría haber más denunciantes, ya que al grupo se han acercado más personas a compartirles sus inquietudes.
“Hemos escuchado de otros papás, que habían escuchado de situaciones similares y yo entiendo, la verdad para nosotros ha sido muy difícil solicitar justicia, yo entiendo por lo que pueden estar pasando estas familias” dijo Antonio.
La familia también se encontró con la sorpresa de que el director, pese a ser ampliamente reconocido en el cargo dentro de la institución, no estaba oficialmente registrado como tal ante la Secretaría de Educación Estatal.
“El mismo día que levantamos la denuncia ante el Ministerio Público, nos acercamos a la Secretaría de Educación de Guanajuato solicitando que se diera de baja a esta persona por los actos que había cometido, para nuestra sorpresa ante los ojos de la SEG ni siquiera estaba acreditado como director de la escuela, había otra persona fungiendo, pero de igual manera lo identificaban como el director y como quien tomaba las decisiones al interior, aún y cuando no estaba acreditado de forma oficial”
Alerta de fuga
Los padres del menor de 8 años solicitaron también que se gire una ficha roja de alerta, por la posible fuga del sujeto, quien de pronto se ausentó de la escuela, al poco tiempo de librarse la orden de aprehensión en su contra.
Pese a que el director del Liceo tenía prohibido acercarse de nuevo a la institución, luego del reporte generado ante la SEG, con la suspensión de clases presenciales debido a la pandemia del covid-19, éste siguió al frente participando incluso en actividades realizadas vía zoom, todavía en calidad de director.
“Tenemos mucho tiempo tratando de saber dónde se encuentra actualmente pero no tenemos la certeza de si ha salido del país, y por eso también queremos exigir que se libere una ficha roja, definitivamente él cuenta con los recursos necesarios para poder salir del país y no ser detenido. Yo pediría también a las autoridades que liberen la ficha para que esta persona sea localizada” pidió Antonio.
POPLab pudo conocer que es Roberto Grijalva Sánchez, quien fuera asesor del exgobernador Juan Manuel Oliva, subsecretario de Impulso a la Administración Pública, subsecretario de Contraloría Social y Mejoramiento de la Gestión Pública con el entonces gobernador Miguel Márquez, así como director general de Capacitación y Productividad en la Secretaría del Trabajo (gobierno federal), entre otros cargos públicos.
