La situación que se presenta en la escuela Estefanía Castañeda y Augusto Federico Froebel, ubicadas en el primer cuadro de la ciudad, para ser puntuales en la calle Río Lerma 232-A, padece los atropellos de personas que dejan su basura justo en la entrada de acceso a esta institución educativa, sin considerar el riesgo al que se expone a los niños, por ser un foco de infección altamente riesgoso; asimismo es preocupante la acumulación de animales nocivos que se suscitan con los desechos, aunado a la pésima imagen que brindan estos actos y el olor detestable que se genera tampoco es algo grato.
Padres de familia, empleados de la escuela y población en general, hacen un rotundo llamado a las autoridades para que se tomen las medidas necesarios y se pueda erradicar este problema de mayúscula relevancia; ya que este tipo de ambientes son dañinos para la salud, pero además es un entorno totalmente adverso para el desarrollo infantil.
Tal como lo denuncia un residente del sitio que nos hizo llegar su testimonio de manera anónima, muchos vecinos no respetan los horarios del camión recolector, por lo que los niños se encuentran con este aberrante escenario y esperan que estas prácticas dejen de suceder.
Refieren que la situación se complica , ya que no solo es una persona sino que son varios los vecinos los que depositan ahí estos restos de toda clase; además de que en fines de semana también realizan esta práctica, por lo que la basura se acumula de varios días.
Independientemente el grupo que se afecta, en ese caso niños, lo cierto es que en cada vecindario se debe respetar el horario del camión recolector y sobre todo dejar las bolsas de basura en el frente de los hogares de cada salmantino, con el propósito de respetar el entorno donde habitamos y se pueda vivir en armonía social.
