Desamparados ante la delincuencia externa, es el sentir de habitantes de la comunidad Congregación de Cárdenas, por los frecuentes robos y asaltos con armas de fuego que siguen asolando a los habitantes, ilícitos que principalmente se orquestan en contra de comerciantes y confían se inhiban con vigilancia permanente.

“Llegan en moto con pistola a asaltar comercio y a gente que estamos haciendo por nuestro trabajo y no se vale que llegue cualquier individuo a asaltar”, por lo que insistieron en la petición que se rehabilite la caseta de policía abandonada que está siendo bandalizada.

La delincuencia que va en aumento, fue atribuida por la ex delegada Leticia Pizano, a la vigilancia de elementos asignados a esta comunidad.

La vulnerabilidad de la colonia se ha mantenido “porque a la comunidad desgraciadamente le hace falta más seguridad, porque ven la caseta en mal estado. Está abandonada”.

Para desalentar la presencia de delincuentes, desde su elección como Delegada, gestionó la vigilancia, “pero no quería un elemento sentado en la caseta permanente”, sino que necesitan un operativo con una unidad para realizar constantes recorridos y se vigile a toda la comunidad.

Congregación de Cárdenas es ya una localidad grande que cuenta con más de 9 mil habitantes y con múltiples actividades comerciales, sin embargo, no cuenta con seguridad adecuada “y está dando pie a que llegue gente a mano armada para asaltar a los comerciantes” a plena luz del día.

Leticia Pizano quien este jueves  entregó   la delegación, reconoció que, sí hay asignado personal de seguridad, pero es un elemento que viene en una patrulla a hacer recorridos a más de 15 comunidades rurales hacia el norte del municipio, difícilmente alcanza a llegar cuando están asaltando “tampoco queremos un policía fuera de cada casa; pero sí por lo menos la comunidad tuviera un elemento con patrulla en la caseta. Sería de mucha ayuda”.