La escuela estatal debe demolerse pero “no hay recursos”.

La Delegación de Salamanca Centro-Sur y la Secretaría de Educación de Guanajuato no han dado solución a la infraestructura que guarda la secundaria 18 de marzo; y para contrarrestar el problema, han presumido que empresarios favorecerán económicamente y con mano de obra a 4 centros escolares que tienen diversas necesidades en su infraestructura.

Aunque se detalla que ya hay trabajos en estas 4 escuelas, no se ha hablado  sobre lo que sucederá con la icónica secundaria 18 de marzo, pues para dicha institución no bastan sólo reparaciones, ya que sigue habiendo un peligro inminente ante las condiciones de deterioro que presenta.

En días anteriores el secretario de educación y el delegado de la región Centro-Sur no quisieron dar declaraciones sobre este centro escolar por lo que continúa siendo un tema en la mira, ya que desde el 2018, se determinó por parte del Instituto de Infraestructura Física Educativa de Guanajuato (INIFEG) que debe ser demolida; sin embargo, a dos años de este señalamiento, la autoridad educativa sigue sin darle importancia al asunto  “porque no hay dinero”; por ello, sin dar detalles de los trabajos que se realizarán en dicha edificación y para calmar a los interesados, se ha enviado un boletín en el que se presume que al menos tres cámaras del comercio apoyaron con material y mano de obra para la rehabilitación de los edificios escolares que por más de un año estuvieron cerradas debido a la pandemia COVID-19. 

Desde hace 3 años la escuela sigue en lista de espera y tiene severos problemas como el reblandecimiento y caída del techo, misma que provocó que desde hace años se delimitara la zona y los alumnos dejaron de tomar clases en áreas cercanas para irse a un taller.

El problema del techo no es el único inconveniente,  también hay Severos problemas con las instalaciones eléctricas, la humedad de las paredes, y la lenta salida de agua que provoca que las canchas se inunden.