Hoy, se confirmó que murió Alma Soledad Gutiérrez, una joven mujer que desafortunadamente perdió la vida durante la balacera que se suscitó el día de ayer, frente a la mirada de su hija y quizá otros familiares, perdió lo más valioso que tenía, sin embargo, la autoridad hace como si nada sucediera.
Mientras Salamanca está de luto, la presidente municipal guarda silencio, continúa presumiendo las lámparas y asiste a comunidades a entregar despensas, bastones, sillas de ruedas, evitando a toda costa responder a la prensa.
En lo que va del mes, se han registrado ya 25 homicidios dolosos, uno de ellos dejó muerta a una mujer cuando una bala perdida le quitó la vida. La intranquilidad crece mientras Beatriz Hernández calla y no emite declaración alguna, ahora ni siquiera ha salido a la luz pública culpado a otros niveles de gobierno.
Durante esta semana, la dirección de Comunicación Social de Salamanca ha enviado como agenda de la alcaldesa solamente actividades internas, sin embargo, algunos medios de comunicación casualmente han obtenido entrevistas “exclusivas” y a este medio se le ha negado un encuentro con la munícipe desde hace varias semanas.
Los hechos violentos crecen y Beatriz Hernández miente diciendo que tiene “actividades internas”, cuando la realidad es que se encuentra realizando giras de proselitismo en comunidades vulnerables, ese trabajo consiste en regalar sillas de ruedas, bastones, despensas y por su puesto posar para la foto.
En redes sociales los ciudadanos han reprobado la omisión de los tres niveles de gobierno y como luto comparten una imagen en la que con tristeza desaprueban y lamentan los hechos que no cesan en esta localidad menesterosa.
Sobre el tema, El Salmantino cuestionó crudamente a la dirección de comunicación social si Beatriz Hernández dará alguna declaración, incluso otros medios también lanzaron la pregunta y hasta la publicación de esta nota editorial, ningún servidor público de atención a la prensa, ha otorgado alguna respuesta de este asunto, haciendo así caso omiso a la población y a sus necesidades.
Hoy, una familia más está de luto, la ciudad entera está de luto, los daños colaterales se han extendido, ya han muerto niños y adultos por estar en el lugar del crimen y ahora parece que no gozamos de libertad, no tenemos ya derecho al libre tránsito, vivimos con miedo y tal parece que tampoco existe un dirigente que sepa qué hacer y cómo hacerlo, porque no nos queda más remedio que protegernos unos a otros; al parecer a nadie le importa lo que nos pasa, ningún gobernante sabe cómo hacer su trabajo y ante la adversidad desaparecen, siempre es la misma historia.
Estamos abandonados por esa gente a la que le dimos el poder y exigimos que alguien responda por todos nosotros y si va a ser el gobierno local, ojalá que en lugar de contestar con un ataque más a la prensa, por primera vez realice una acción que evidencie de qué están hechos los funcionarios públicos de primer nivel. Que esto no sea una quimera.