Los encargados de promover la no violencia en el futbol mexicano quedaron mal ante los aficionados. En el partido entre atlas y chivas, los jugadores de ambas escuadras se enfrascaron en un conato de bronca en la recta final del primer tiempo.
Los sucesos vividos en el estadio Jalisco se dieron apenas un par de semanas después de que los aficionados del Atlas fueran protagonistas de una trifulca en La Corregidora de Querétaro, donde varios fanáticos rojinegros terminaron en el hospital luego de recibir una brutal golpiza.
A raíz de ello, la Liga MX comenzó a promover el futbol sin violencia, incluso con un abrazo entre los jugadores y cuerpo arbitral al minuto 62, pero esta semana todo eso se hizo a un lado.
Corrían 48 minutos del Clásico Tapatío cuando a Alexis Vega no le pareció la forma en la que Aldo Rocha fue a la disputa por el balón, así que lo empujó por la espalda, situación ante la que el capitán rojinegro respondió.
De inmediato corrieron los jugadores de las dos escuadras, así como los de las bancas para defender a sus compañeros. Entre los empujones, Miguel Ponce fue uno de los que se excedió un poco al tomar del cuello a un rival, situación por la que recibió la tarjeta roja.
Después de ir al VAR para revisar lo que sucedió, el silbante decidió expulsar también a Jairo Torres, quien fue el elemento que fue ahorcado por Ponce.