Al señalar que México tiene una de las licencias maternas más cortas del mundo, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), recomendó a nuestro país extender la licencia de maternidad de 12 a 18 semanas como lo marca la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Y, además, sugiere acelerar el establecimiento de zonas para la lactancia materna, “de la misma manera que se han podido implementar áreas para fumadores”.
Durante la presentación de la Guía de Fomento de una Cultura de Lactancia Materna -que ya contempla la recomendación para instalar salas de lactancia- el representante de la Unicef México, Christian Skoog, detalló que en caso que se presentara una enfermedad, la licencia de maternidad podría extenderse por cuatro semanas más.
El objetivo es favorecer la lactancia y brindar a las mujeres en sus centros de trabajo las facilidades que necesite, ya que está comprobado que las mamás que trabajan, amamantan menos a sus bebés, frente a las mujeres que no realizan actividades laborales.
De acuerdo con la encuesta nacional de salud y nutrición (ENSANUT) 2012, el promedio de duración de la lactancia materna fue de cuatro puntos seis meses frente a nueve meses entre las mujeres no empleadas.
Diversos estudios demuestran que se debe promover y fomentar la lactancia materna, pues mejora la productividad, lealtad y satisfacción laboral y hasta la imagen pública de los empleadores.
«Además, se contribuye a disminuir el ausentismo y la rotación de personal, hablamos de una acción gana-gana para todos, los bebés, las madres, las empresas y todos los lugares de trabajo”, indicó el representante de la Unicef México, Christian Skoog.
Por su parte, el secretario del Trabajo y Previsión social, Roberto Campa Cifrián, se comprometió a que antes que termine la presente administración todas las oficinas de la dependencia que encabeza contarán con salas de lactancia y además, aseguró que la nueva guía se difundirá a nivel nacional.
Cabe señalar que la Guía de Fomento a la Cultura de la Lactancia Materna en los centros de trabajo establece que durante los primeros seis meses de vida de las y los lactantes, el lugar de trabajo brindará las condiciones que hagan posible el mantenimiento de la lactancia materna exclusiva.
Luego de ese periodo y hasta los dos años continuará ofreciendo apoyo para sostener la lactancia materna complementaria.
El centro de trabajo dispondrá de una sala de lactancia para que cualquier madre trabajadora que así lo desee pueda amamantar o extraer y conservar su propia leche en un sitio adecuado.
