
La reciente publicación de un decreto presidencial firmado por Donald Trump, que busca eliminar el principio de ciudadanía automática por nacimiento en territorio estadounidense, ha desatado una ola de reacciones legales en todo el país.
Un total de 22 estados presentaron demandas judiciales para bloquear la entrada en vigor de esta medida, argumentando que viola la Constitución de los Estados Unidos, en particular la Enmienda 14, que establece claramente el derecho a la ciudadanía por nacimiento.
Grupos defensores de derechos civiles, legisladores y organizaciones migratorias han calificado el decreto como “Discriminatorio e inconstitucional”, advirtiendo que, de aplicarse, tendría implicaciones legales y humanitarias profundas para millones de personas nacidas en suelo estadounidense.
Este nuevo enfrentamiento legal se perfila como un debate crucial sobre el alcance del poder presidencial y la interpretación de derechos fundamentales, a medida que las cortes federales comienzan a revisar el caso.
Por su parte la Casa Blanca no ha emitido comentarios adicionales.