
El director de Seguridad Pública de Salamanca, Juan Pablo Ramírez Talavera, confirmó que el retiro de cámaras de videovigilancia en mobiliario público no será una acción aislada, sino una estrategia permanente que abarcará todo el municipio y las comunidades rurales.
De acuerdo con el funcionario, esta medida obedece a la detección de múltiples cámaras instaladas sin permiso ni justificación oficial, lo cual representa un riesgo, ya que su uso podría estar vinculado a actividades ilícitas.
“Toda cámara colocada en mobiliario público que no esté debidamente autorizada o acreditada tendrá que ser retirada. No sabemos si realmente está protegiendo un domicilio o si se usa con otros fines de naturaleza ilícita”, explicó Ramírez Talavera.
El director señaló que la falta de control sobre estos dispositivos impide asegurar que su función sea legítima. Por ello, su remoción es parte de la estrategia de seguridad implementada para proteger a la ciudadanía.
Además, pidió la comprensión de los salmantinos, subrayando que las acciones buscan fortalecer las condiciones de seguridad en todo el territorio municipal.
“Nuestro deber es velar por la seguridad de todas y todos. No podemos permitir la existencia de cámaras cuya operación no esté plenamente regulada”, concluyó.
La autoridad recordó que todo dispositivo de videovigilancia debe contar con los permisos correspondientes que acrediten su propósito y ubicación conforme a la ley.