Mientras el alcalde Antonio Arredondo presume la inversión por más de 100 millones de pesos en seguridad, los policías trabajan en pésimas condiciones.
En la dirección de Seguridad Pública los chalecos son viejos, los radios ya no sirven, sólo se abastece una vez al día las patrullas y las prestaciones a los oficiales son casi nulas.
Anomalías que fueron denunciadas por los policías desde diciembre del 2015 cuando pararon labores para exigir mejores condiciones laborales, medida que aplicaron nuevamente en marzo de este año e incluso en estas movilizaciones también participó el oficial Rigoberto Jiménez, asesinado este martes junto con Rogelio Miranda.
Arredondo Muñoz informó en entrevista que durante este año se invirtieron más de 100 millones de pesos en ese rubro.
“Hemos estado invirtiéndole fuerte en materia de seguridad, llevamos una inversión tan sólo en este año más de 100 millones de pesos, renovamos parque vehicular como ustedes saben, la coordinación, capacitación, uniformes, equipo, entonces estamos trabajando todas las áreas”.
Por su parte los policías desmintieron al edil al señalar algunas de las carencias en la corporación policíaca.
“Este año se compraron como 20 a 30 chalecos (antibalas) pero se los repartieron y quien alcanzó, alcanzó, los demás seguimos con los chalecos pero están bien viejitos”.
Además las pilas de los radios se descargan rápidamente por lo que quedan incomunicados y deben pagar recargas para poder llamar a la base o a los comandantes en turno.
Por las mañanas deben abastecer a las patrullas, pero en el último turno que es el de la noche queda poco combustible.
El aumento al 4 por ciento al salario no se ve reflejado ya que perciben el mismo sueldo debido a los descuentos por diferentes impuestos; en cuanto a becas para sus hijos, sólo se otorga 100 pesos mensuales por uno y los demás quedaron fuera del apoyo.
En cuanto a la portación de armas de fuego, los egresados de la Academia de Policía no llevan.
“A los de la última generación no les han dado, pero a raíz de lo que pasó con los dos compañeros a todos se les dio en armería, pero hoy (miércoles) el coordinador y el comisario volvieron a quitarle las armas a los nuevos”.
En uniformes, los elementos sólo recibieron en este año dos, uno para la mañana y otro para la noche. Consideraron que la única inversión del 2016 fue la adquisición de las 40 patrullas.